Otoño en el Tiempo

Otoño en el Tiempo
Libro de poesía

jueves, 31 de octubre de 2013



Finalmente es esta desazón
consuelo inabarcable
de deseo

semilla de silencio
entre mis piernas

flor apabullante e insólita
de claridad que no tenía que ser

Quién diría que iba a
arder buscando fórmulas
para qué

Un premio por bucear no habrá
pero habré sido yo
oscuridad



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Hay muertos que sonríen
lágrimas que reflejan su inmensa alegría
porque aunque sólo fue un suspiro su vida
fue

Muertas llenas de caricias
que no se cansan de ser breves, húmedas, frescas...
luces de la conciencia
musgo
raíces

sueños
transparencia

Hay vivos que desean estar muertos
Vivas que sólo desean
con inmensa desesperación: sedientas, hambrientas...
milenarias se tiñen la boca de colibríes

los miran volar
libres al fin

Pero los peores son los muertos
las muertas que no están aquí
porque son como los presos/las presas
detenidos un momento, por siglos
en ese limbo de la injusticia y el recuerdo

Son nostalgia y melancolía a cuestas
Y son el corazón retumbando
de la vida
son la gravedad
de mis días
...


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lunes, 28 de octubre de 2013



Ayer fue un siglo pasado, de hoy
sólo eres cenizas, ese polvo que niega
su constitución efímera, su experiencia
vacía y solitaria

Arando el invierno...
por si acaso se abre el cielo



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jueves, 24 de octubre de 2013



Yo me rompo
Yo me quemo
Yo te digo que te amo

Yo destrozo esta carne
Yo riego este instante
Con brisa de vértigo

Con locura matutina, mirando al mar
los sueños se golpean como olas
hasta galoparse
someterse, cambiarse los nombres

Yo no tengo nombre
soy un caballo furioso que cabalga galaxias
brama huye tropieza
pero no para

Yo me rompo
Yo me quemo
Yo te digo que te amo



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miércoles, 23 de octubre de 2013



Dicen que la lechuza no duerme
y vigila siempre
expande sus alas melancólicas

abraza los siglos
mis pasos retorcidos
por el laberinto del sueño

Sus ojos rojos
blancos, negros, los he visto
me ha mirado, ha revoloteado 

Entre presagios, ella devora pensamientos solitarios
ahoga la voz del silencio
grita entre pesadillas, ruge encolerizada

Abre una puerta para entonar el olvido
para hacer agua el presente
la grotesca realidad que es una ficción horrorosa 

Una parodia de los días
y una muere como ella, duerme nuevamente a la eternidad
y se mece errante, ante la adversidad crea oxígeno entre orgasmos

Decide ser noche blanca
como el árbol, como el viento, como el tiempo...
como las pesadillas del conocimiento



Húmedas calles de ciudad
como galletas remojadas al café

Húmedas banquetas arrojadas por el verde
de las raíces de los árboles
ese silencio que grita

Y andan mis pies
sobre esa mirada mía
de este sueño galopante

traficante de luz...
nubes acurrucadas se vierten sobre el
pavimento derrotado

Húmedos pensamientos
recitados al abismo frío
de todos los tiempos



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lunes, 21 de octubre de 2013



¿Quién no ha combatido con la muerte a muerte, poesía?

Sí. Quizá lo único que hago es engañarte
desde que te supe oscuridad
te presentí
rondando cerca, merodeando como el sueño eterno

Callarte a veces ha sido una opción
Pero tú no eres una opción

Eres mi propia voz, más fuerte que yo
y sin embargo, aquí estamos

Dando saltos en el horizonte
como el pensamiento
como un trapecista solitario
no seguimos un patrón

y mientras duermo, te vigilo 
aunque sea algo retorcido
cuido tu sueño, como cuidas del mío
te sé, no puedes esconderte más

Cerca del precipicio
cogí tu mano un día
y así andamos juntas, como dos bestias
por el bosque oscuro de la melancolía

intercambiando breves guiños 
azules del recuerdo
como agua de río verde
cerca del musgo

Desafiando la sin razón
aullando vertiginosamente 
al corazón
como la hiena 

Hambre es lo que tenemos
hambre todo el día
de ti, de mí
de la vida, nos nutriremos al fin







domingo, 20 de octubre de 2013




Al tiempo que asfixia de muerte la vida
Principio y fin de las estaciones más precarias,
destructoras o creadoras de resplandores
eternos, melancólicos pájaros negros…

Nada quedará del miserable aliento
del ayer, notas silenciosas de tu voz
susurros suaves del universo
aquella vocación de ser

Un día quizá el polvo carne será
y siempre volverás
un paso a paso
tras la eternidad




jueves, 17 de octubre de 2013



¿Qué se siente carne no ser?
Cerca del río frío y la piedra huidiza, mi piel suspiró

¿Cuántas veces has acariciado las ruinas de los segundos?
Siglos y siglos de soledad

¿Has hablado con el polvo de las esquinas, te lo has comido o fue conejo?
Fue la cal, le provocó ella
hemos fornicado asustados en el olvido

Oscurece y es de día, acaricio el tiempo del insomnio y acecho su melancolía.
No me da tiempo ni me teme el paladar
escucho el aroma de los sonidos
en el vagón de al lado
paso los días

¿Roe tus días?
Esta cerca y me mira, de lado
de reojo me busca
delineados su parpados, como un dios egipcio, me acecha
a punto del orgasmo

Se sacude y salta
no pronuncia mi nombre
me ama
disfraza los días
escapa

Nace de la luna
opaca, ¡qué sueña marmotas a la distancia!
y se hace breve puente del nocturno
mis dedos gritan
se agitan cerillas bravas y tímidas



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lunes, 14 de octubre de 2013



Te busco en mi sangre
te seduzco con el pensamiento
pero tu mirada no alcanza
no brilla, no encaja
se hace pereza

reprochable
lucero que no arde
aunque te llame con la noche
y las sombras que te rondan
te arrebaten

son vigías
incontrolables
de hastío y soledad
cuando de azul, pinta el cielo
un otoño cegador

no habrá más sangre
para ti
florezco para mí
tan sólo la tierra
cuida a quienes aman

Ella vibra
e inflama de alegría
danza con todo su ser
riega campos estériles
por qué, no sé


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Daría mi reino de sombras
por una tarde como ésta
tirada en la pirámide del sol
a la luna

coloreada por serpientes
a mis pies
prisioneras de él lo concreto
o caminar en sueños

Abrazarme a Tenayuca
aunque sus alambres de púas
ahora duelan
como ella y sus recovecos

deslizarme desde Cuautepec
por los senderos nocturnos
de sus cerros
sumidos en él


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viernes, 11 de octubre de 2013



El vacío
se peina
frente al espejo
y palpita
de deseo

tiene sueño
no ruge
no canta
no añora
duerme

en silencio
se arropa
galopa
destroza
devora

Tiene hambre
de ti
pero no te nombra
no te llama
arde a solas

se consume
como el día los segundos
como la noche al horizonte
como
como




Ese pasado
un río negro
podrido
como tú
como nuestro amor

retorcido
que guarda 
calma
se mira al espejo
y anda

por toda la casa
enardecido
lanzando dardos
a tu foto
a tu espectro

a mí